La organización provincial agraria advierte que, si en el mes enero no se recibe una respuesta por parte de la Administración acorde con la gravedad del escenario, el sector ganadero estará obligado a realizar actos de protesta y movilizaciones, como han venido anunciando desde ASAJA.
Una representación de ganaderos de la provincia de Ciudad Real, encabezada por el secretario general provincial de ASAJA, Florencio Rodríguez, ha mantenido una reunión de alto nivel con la Administración regional, con la Directora General de Ordenación Agropecuaria, Lydia Benítez; y con la Delegada Provincial de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Amparo Bremard, insistiendo en las demandas del sector ante los graves perjuicios que las enfermedades ganaderas están ocasionando en las explotaciones.
Durante el encuentro, los ganaderos trasladaron su máxima preocupación por la Lengua Azul, que está golpeando con especial intensidad a la provincia de Ciudad Real, la más castigada con diferencia de toda Castilla-La Mancha. “La situación es crítica: muchas explotaciones están al borde de la quiebra y, de no adoptarse medidas urgentes, se enfrentan al abandono de la actividad”, han denunciado.
Los profesionales explicaron que están realizando “un esfuerzo brutal” para sostener sus explotaciones en medio de una crisis sanitaria sin precedentes, con consecuencias muy graves: muertes, abortos, caída de productividad, infertilidad y un impacto económico que califican de “inasumible”. Subrayan que las pérdidas son muy importantes incluso en explotaciones que han vacunado a sus animales, lo que ha generado un sentimiento de desamparo e impotencia en el sector.
Por ello, exigen a al Gobierno regional que habilite ayudas directas, similares a las ya aprobadas en Extremadura o Andalucía, para compensar los daños y evitar el cierre de explotaciones que sostienen buena parte del tejido rural y económico de la provincia. Aunque reconocen la disposición y receptividad mostrada por el Gobierno regional durante la reunión, ASAJA advierte de que ya no hay margen para la inacción: “Es urgente actuar ya. Los ganaderos no pueden soportar más pérdidas”, insistió Florencio Rodríguez.
Creación de un Grupo de Trabajo y advertencia de movilizaciones
Como resultado del encuentro, Administración y sector ganadero han acordado constituir un Grupo de Trabajo. La próxima reunión está prevista para las primeras semanas de enero. Su objetivo será analizar con rigor y con datos oficiales –incluyendo los registros de muertes en las explotaciones– el alcance real de los daños y definir un esquema de apoyo ajustado a la gravedad de la situación.
No obstante, ASAJA advirtió que el malestar entre los profesionales es creciente. “Los ganaderos están al límite, completamente crispados”. Y añaden que, si en enero no se recibe una respuesta clara, contundente y acorde con la gravedad del escenario, el sector actuará en consecuencia, anunciando actos de protesta y posibles movilizaciones.
ASAJA Ciudad Real reitera su compromiso con la defensa del sector ganadero y exige que se adopten de inmediato medidas eficaces que permitan salvaguardar la viabilidad de las explotaciones y el futuro de miles de familias que dependen de ellas.




